Catedral Metropolitana de Vitória

La Catedral Metropolitana de la Vitória fue construido en el mismo emplazamiento de la antigua Iglesia de Nuestra Señora de la Vitória, construido durante la fundación de la ciudad por el concesionario primero de la capitanía del Espírito Santo, Vasco Fernandes Coutinho, en torno al año 1550, cuando la ciudad todavía se llama "Vila Nova".

Cuando se creó la Diócesis del Espírito Santo, y nombrado el primer obispo João Baptista Correia Nery, la pequeña iglesia pasó a la condición de catedral y ya no contenía el número creciente de fieles, la evaluación del obispado.

Por lo tanto, fue demolido para dar paso a una iglesia más grande y con estilo acorde con la nueva etapa política y económica, que también refleja el deseo de las autoridades de la primera república de la "modernización" de la Capital. Esta nueva política incluye nuevos edificios que ocupan el lugar los recuerdos antiguos, considerados de un pasado sin gloria, sin consuelo y sin tecnología.

La construcción de la catedral se inició en 1920 a partir de un diseño del paisaje Paulo Motta y abarcó casi 50 años, sólo se completó en 1970. Los trabajos internos fueron inauguradas en 1937 y las torres de la iglesia fueron construidas sólo en la década de 1950.

Símbolo de la ciudad de Vitória, la catedral fue mencionada por el Consejo de Estado de la Cultura en mayo de 1984. Su entorno ha cambiado profundamente en el tiempo.

Las antiguas residencias de la época colonial que la rodeaba, hay solamente dos, ubicadas en la calle José Marcelino José, uno de los cuales es la sede del Instituto del Patrimonio Histórico y Artístico Nacional - IPHAN.

Hay pocos registros de la antigua matriz, que fue la primera clase y una de las iglesias más importantes de la ciudad durante casi 400 años. Sólo se sabe que

el 8 de septiembre de 1551, después de la victoria en una de las batallas más decisivas, muchos de los cuales fueron luchadas con los indios Goitacazes en la pelea por territorio, los primeros colonos decidieron consagrar la iglesia que se estaba construyendo a la Virgen Vitória, a partir de entonces, el santo patrón del pueblo.

Los colores actuales del estado de Espírito Santo fueron elegidos de acuerdo con el color del vestido y el vestido santo: azul y rosa, respectivamente.

Durante los casi 50 años de su construcción (1920-1970), la Catedral mantuvo su estilo ecléctico, inspirado en la arquitectura gótica y sobre todo la catedral de la ciudad alemana de Colonia (cuya construcción se inició en el siglo XIII y finalmente se abrió a 1880).

Participó en las obras de la iglesia diferentes artistas de dimensiones nacional y internacionales: Pablo Motta desarrollado el primer proyecto de la Catedral; Waldemar Bogdanoff fue responsable de trabajos internos, Alexandre y Gaston Formeti trabajó en vidrieras de colores que adornaban el interior de la iglesia y André Carloni asumió el proyecto de fachada en 1950, trabajando principalmente en las torres.

El encanto de las vidrieras, donados por las familias influyentes, grupos locales y hermandades de mujeres, es una de las señas de identidad de la catedral. Como en la Europa medieval, las vidrieras se utilizan para representar escenas bíblicas y propagar la fe cristiana.

Podemos encontrar en el interior (sótano) una cripta, donde están enterrados algunos de los obispos de alto rango de la historia de la Catedral, como Dom Luiz Scortegagna, que fue responsable de la reanudación de la construcción de la catedral en 1933.

Fuente: Folder Projeto Visitar – Centro Histórico de Vitória.